RIGO
CABRERA

SU HISTORIA

Rigoberto Cabrera (RIGO, como todos le conocen), nació en el Barrio Guaraguao de Bayamón, PR. Es el hijo menor de Pura Sánchez, el número nueve (9) de todos sus hermanos. Rigo siempre se destacó en todo su entorno familiar por ser amable, honesto, cariñoso y por tener un corazón que siempre ha estado dispuesto ayudar al necesitado. Rigo perdió su padre cuando tenía siete (7) años de edad y su madre prácticamente crio solos a todos sus hijos; los hijos mayores le ayudaban cuidando a los menores y ella sustentaba a toda la familia.

A la edad de 17 años su hermana mayor lo recibió en Orlando, FL, para que él tuviera la oportunidad de experimentar un cambio de vida, ya que él no andaba por buenos caminos por haberse “juntado” con gente indebida en su barrio. Es ahí cuando su vida tomó otro rumbo. Esto fue algo que nunca se vio venir, ya que su personalidad siempre le propiciaba ser una persona que podía tomar decisiones sabias e inspirar a otros como todo un líder. Rigo estuvo 20 años sumergido en el mundo de las drogas debido a las malas decisiones que tomó. Esto, al punto de que después de haber tenido una esposa y 3 hijas preciosas, perdió todo eso, quedando en la calle y teniendo que ir a dormir en los zafacones de basura de la ciudad.

Todo ese potencial fue puesto en pausa en la vida de Rigo durante esos años. No fue hasta el 1993 que DIOS se le presentó a su vida y con solo aceptar esa intervención divina, DIOS hizo un milagro de tal naturaleza que Rigo nunca tuvo que participar de un programa de desintoxicación para adictos para poder ser libre de esa esclavitud.

Rigo comenta que todos tenemos un ideal y una aspiración en la vida. Nosotros formulamos ideas, proyectos y metas de vida con la intención de verlos cumplirse. Y si es posible, hasta en sus más mínimos detalles y en el tiempo más corto posible. Veamos unas citas directas de Rigo a este respecto:

“Eso siempre estuvo dentro de mí. Sin embargo, me costó mucho lograrlo debido a algunas de mis decisiones. Comencé a dar mis primeros pasos en la industria de las losas con mi cuñado Mario López cuando ya había empezado a enderezar mi vida sirviéndole a DIOS, conociéndole cada día más y recordando los principios cristianos que mi madre me había inculcado cuando era pequeño. Tengo una deuda de gratitud con Mario y le estaré eternamente agradecido por haber invertido tanto en vida.

Así fue como comenzó todo. Es por esto que al día de hoy, con la promesa de DIOS cumplida sobre mi vida, es que existe la empresa RIGO TILE; empresa en la que DIOS me ha dado el honor de ser su presidente y que es un testimonio en esta ciudad de Orlando, FL.. Rigo Tile fue fundada en 1999.

Durante todos estos años he vivido miles de experiencia, logros, satisfacciones y milagros en la misma, como comerciante y como individuo. Y cuando ya me preparaba para dar lo mejor de mí fue cuando la vida me empezó a facturar el abuso al que sometí mi cuerpo durante mi juventud. Fue en el 2005 cuando mi corazón empezó a presentar problemas de insuficiencia cardíaca. Esta condición de salud se fue agravando hasta que en el año 2007 tuve que pasar por el proceso de un trasplante de corazón, intervención que fue exitosa y que cambio mi vida. Durante todos estos años atravesé por otras situaciones de salud en donde la muerte me asechaba constantemente. Tanto es así que en el 2018 me tuve que someter a un trasplante de riñón y ver como DIOS se glorificaba en todo esto extendiéndome los años de vida. Claro está, yo sé que estaré en la tierra hasta el día que Él tenga escrito para mí.

Es debido a que tengo el honor de decir que he experimentado tantos milagros en mi vida que quise compartir algunos de ellos haciendo un pequeño documental y plasmar así las dimensiones y la magnitud de la misericordia de DIOS en mi vida. Les invito a ver este documental en mi página web.

Le doy mil gracias a todos aquellos que con el pasar de los años han aportado en mí, desde lo más insignificante, hasta grandes detalles que muchas personas han tenido y tiene conmigo hasta hoy. Vivo inmensamente agradecido por todas esas personas y por supuesto, por el privilegio de ser un vehículo en las manos de DIOS, vehículo por el que a Él le ha placido manifestar su gloria a diario en mi vida y en las de otras personas.”